ACNUR se prepara para una nueva afluencia de refugiados en Sudán del Sur

CONDADO DE MABAN, Sudán del Sur, 8 de noviembre (ACNUR) – Aneim acaba de alcanzar el último campamento de refugiados de Sudán del Sur, Gendrassa, tras huir, a mediados de octubre, de un devastador ataque aéreo en su pueblo, a través de la frontera del estado de Nilo Azul en Sudán.

Para el ACNUR, la llegada del ganadero y su extensa familia de 11 miembros era una señal más de que las inundaciones estaban retrocediendo y que la gente estaba de nuevo viajando a un lugar seguro en el estado sursudanés de Alto Nilo tras los ataques a sus pueblos. La agencia para los refugiados está, en consecuencia, tomando medidas preventivas para hacer frente a una probable afluencia acelerada.

En la última semana de octubre, el personal del ACNUR registró 72 nuevas llegadas en Gendrassa, la mayoría mujeres y niños. Aunque pequeña, ésta era la cifra semanal más alta de llegadas desde que la estación lluviosa comenzó en mayo e indicaba que los números estaban comenzando a aumentar con el patrón de tiempo cambiante. Antes, la inundación era sencillamente demasiado profunda para cruzar, pero los más desesperados están arriesgando su suerte ahora que el nivel de las aguas comienza a descender.

Mireille Girad, representante del ACNUR en Sudán del Sur, dijo que era probable que muchos más refugiados cruzaran la frontera si los enfrentamientos entre las fuerzas armadas sudanesas y el Ejército de Liberación del Pueblo de Sudán-Norte se intensificaran durante la próxima estación seca, que comienza a mediados de noviembre. La escasez de comida sería también un factor de presión.

Ella dijo que el ACNUR había comenzado a preparar un plan de contingencia para hacerse cargo de las necesidades más apremiantes de hasta 30.000 llegadas de nuevos refugiados en el condado de Maban de aquí a fin de año. El plan abarca áreas clave tales como alojamiento, asistencia sanitaria, raciones de alimentos y artículos no alimentarios como lonas plásticas, mantas, colchonetas para dormir, paquetes de higiene y utensilios de cocina.

El ACNUR actualmente trabaja en cuatro campamentos de refugiados en el condado de Maban, en el estado de Alto Nilo, incluyendo Gendrassa, que alberga a unos 14.300 refugiados y es el único que no ha alcanzado todavía su capacidad máxima. Hay sitio para otros 5.000 refugiados. Girard dijo que la agencia para los refugiados estaba en negociaciones con las autoridades locales para abrir nuevos centros de tránsito y campamentos en otros condados.

El único emplazamiento potencial para un nuevo campamento en estudio está situado en un terreno de 400 hectáreas y podría albergar entre 20.000 y 30.000 refugiados. Otras ubicaciones en estudio, todas fuera de Maban, son Melut, Beneshowa y Longichok.

A diferencia de los otros campamentos en Maban, el nuevo emplazamiento propuesto se asienta sobre una base de guijarros, tierra y arcilla, lo que lo hace más fácil a la hora de instalar sistemas de drenaje para áreas de lavado y letrinas. Es también un área de arbustos, praderas y árboles que puede ser usada para construcción y leña, pero esto necesita ser manejado cuidadosamente para evitar roces con las comunidades de acogida y para proteger los recursos naturales y el medio ambiente.

La armonía es vital y el ACNUR y otros grupos de ayuda han establecido foros donde los refugiados y las comunidades de acogida están siendo involucrados en iniciativas para prevenir o resolver diferencias sobre la tierra, recursos e incluso el ganado que los refugiados traen consigo y que pastan en la tierra de la comunidad. A los habitantes de esta área tan remota y subdesarrollada de Sudán del Sur se les ha dicho que podrán acceder a instalaciones en el nuevo campamento tales como colegios y centros de salud y posiblemente encontrar empleo.

Si se da el visto bueno, los expertos del ACNUR buscarán fuentes de agua subterráneas. Además, el agua será transportada en camión al nuevo sitio propuesto desde un pozo situado a 12 kilómetros de Gendrassa.

El ACNUR mientras tanto ha intensificado las actividades de observación en la frontera en varios puntos de entrada. En el plan de contingencia, nuevos centros de tránsito pueden establecerse cerca de los puntos de entrada fronterizos. La gente permanecerá en esos emplazamientos hasta que puedan ser trasladados a un campamento.

El ACNUR también está terminando el registro de todos los refugiados, incluyendo los casos pendientes que todavía no habían sido procesados. Esto permitirá al personal de registro y protección de ACNUR dedicar todos sus recursos a cualquier nueva afluencia importante en los próximos meses.

Un socio clave de ACNUR, el Programa Mundial de Alimentos, se está preparando también para el futuro. El PMA ha almacenado raciones de comida para 15.000 nuevas llegadas en el campamento de Jamam, que será un centro de tránsito. Existencias adicionales de mezcla de maíz y soja han sido alistadas para satisfacer los requerimientos nutricionales de los bebés y niños de corta edad con desnutrición de moderada a aguda.

El granjero Aneim cree que el ACNUR está haciendo lo correcto, al pronosticar que los refugiados pronto comenzarán a salir a través de la frontera al condado de Maban desde sus escondites en las montañas y bosques del estado de Nilo Azul.

"Ellos están sufriendo muchísimo. Pero aquí dormirán por las noches sin preocuparse por las bombas que explotan", aseguró. "Incluso si lo has perdido todo – como yo – este campamento me ha dado la oportunidad y la confianza para comenzar mi vida de nuevo".

Por Pumla Rulashe en Maban, Sudán del Sur

Gracias a la voluntaria de UNV Online Julia Ester de Paz Pérez por el apoyo ofrecido con la traducción del inglés de este texto.