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"Ellos ya son colombianos"

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"Ellos ya son colombianos"

Gracias a la extensión de la medida "Primero la Niñez," los niños y niñas nacidos en Colombia, de padres venezolanos, accederán a la anotación de "válido para demostrar nacionalidad" en sus registros de nacimiento, evitando así al riesgo de apatridia. Más de 66,000 niños y niñas ya han sido beneficiados por esta medida.
23 Diciembre 2021
Marsely y sus hijos Santiago (3) y Damaris (1) juegan en la terraza de un albergue en Bogotá, antes de participar en actividades de formación técnica y pedagógicas que apoyan su integración socioeconómica en Colombia.

El día en que su hijito Santiago se enfermó, Marsely no supo qué hacer.

A Marsely, una venezolana que se estableció en Colombia en 2019, huyendo de la escasez de medicamentos y comida y la inseguridad creciente, ya había intentado acceder a servicios médicos en su país de acogida y no había sido nada fácil. Ella no contaba con documentos que regularizaran su permanencia en Colombia, y cuando el pequeño Santiago se enfermó, pensaba que volverían a enfrentar a la misma situación con él.

Pero no fue así. Santiago nació en suelo colombiano, y gracias a una reciente medida del gobierno nacional, él y decenas de miles de otros niños y niñas hijos de padres venezolanos, nacidos en Colombia, tienen la posibilidad de adquirir la anotación de “válido para demostrar nacionalidad” en sus registros de nacimiento expedidos en Colombia.

“Mi hijo es colombiano, él nació aquí y tiene sus beneficios aquí”, dice Marsely, 24, con una gran sonrisa. Como ciudadano, Santiago pudo ser inscrito sin ninguna dificultad al sistema de seguridad social y ahora siempre que él tenga una emergencia de salud, le podrán dar la atención que necesite. “La abogada de la Registraduría … me entregó el registro y yo le pregunté si eso era válido para salud, para cosas así, y me dijo que sí, que Santiago era totalmente colombiano”.

Antes de la adopción de la medida, conocida como “Primero la Niñez” en 2019, los niños y niñas nacidos en Colombia solo adquirían la nacionalidad colombiana si al menos uno de los padres era colombiano, o, en el caso de ser ambos extranjeros, si estaban domiciliados legalmente en el país al momento del nacimiento. Desde agosto de 2019 hasta finales de octubre de 2021, más de 66.000 niños y niñas se han beneficiado de esta medida que tiene como objetivo evitar la apatridia, que es la situación en la que se encuentra personas cuando no son reconocidas por ningún país como ciudadano. “Primero la Niñez” ha sido prorrogada hasta agosto de 2023, lo que beneficiará a muchos otras niñas y niños como Santiago.

Otro niño que ya se ha beneficiado es Juan Ángel, el hijo de 1 año de Eliana, una madre soltera de 22 años quien viajó sola y embarazada a Colombia desde Maracaibo, Venezuela, dejando todo atrás para buscar protección y un mejor futuro. Como Juan Ángel nació en Colombia en 2020, él obtuvo su registro civil de nacimiento con la anotación “válido para demostrar nacionalidad”, lo que le permitirá acceder a derechos como cualquier otro colombiano.

“Me siento bien porque él ya está registrado y ya puede acceder al médico”, dice Eliana, quien entró a Colombia por la frontera de Maicao, en el departamento de La Guajira, en el extremo noreste colombiano, a inicios de 2020. Una tía que ya estaba viviendo en la región le brindó alojamiento por pocos días mientras daba a luz a Juan Ángel. Poco tiempo después ella se quedó sin albergue y tuvo que acudir al Centro de Atención Integral del ACNUR, la Agencia de la ONU para los Refugiados, para poder contar con un techo y servicios básicos para su recuperación postparto. 

Actualmente, Eliana vive con Juan Ángel, su hermana y dos sobrinos en el Barrio Cuminaya en Maicao y está trabajando en la venta de bebidas para estabilizar su situación económica.

El ACNUR celebra la adopción de la medida “Primero la Niñez” por parte del Gobierno de Colombia, así como su extensión por dos años, ya que salvaguarda a miles de niños y niñas del riesgo de apatridia y se alinea con los compromisos de protección acordados en el Pacto Global de Refugiados de 2018.

“Ahora quiero buscar la estabilidad, inscribir al niño al jardín y si es posible yo también estudiar”, dice Marsely.

*Nombres cambiados por motivos de protección.