El Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados se pronuncia con respecto a la decisión del Gobierno de EE. UU. sobre el reasentamiento

Aplaudo que el presidente Biden haya decidido retomar el liderazgo de su país en materia de reasentamiento de personas refugiadas.

El que haya optado por incrementar el límite de reasentamientos este año constituye, junto con la admisión de 62.500 personas refugiadas, una medida que salvará muchas vidas y que protegerá a quienes se encuentran en mayor situación de vulnerabilidad.

La decisión se toma en un momento en el que el reasentamiento de personas refugiadas se ha desplomado a nivel mundial de manera nunca antes vista. Esto se debe, por un lado, al límite impuesto por los estados y, por otro, al impacto de la pandemia de COVID-19.

El año pasado, menos de 23.000 personas refugiadas fueron reasentadas a nivel mundial.

En casi dos décadas, nunca había visto cifras de reasentamiento tan bajas.

Por lo tanto, llena de esperanza – tanto a las personas refugiadas como al programa mundial de reasentamiento – que EE. UU. se haya comprometido a aumentar el número de admisiones este y el próximo año.

Espero que esta decisión inspire a otros países, y que estos también retomen y amplíen sus compromisos en materia de reasentamiento. 

ACNUR, la Agencia de la ONU para los Refugiados, seguirá brindando apoyo en la ampliación del programa y ayudará a acelerar la admisión de personas refugiadas.