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Aspirar a más

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Una campaña para financiar estudiantes refugiados con talento

El Programa de Becas para Refugiados del ACNUR (DAFI) permite que la juventud refugiada estudie en instituciones de educación superior. Nuestra intención con esta campaña es apoyar a cerca de 1.800 personas refugiadas en el mundo en el acceso a educación superior hacia 2023.

Nuestra visión es construir un futuro en el que las personas refugiadas sean incluidas en las comunidades que las acogen, donde puedan ser parte del sistema educativo y del mercado laboral, así como ser autosuficientes, sin dejar de contribuir a la economía local.

Ampliar el acceso a la educación secundaria y superior para incluir a las personas refugiadas es un elemento central en nuestra visión, que se encuentra en el núcleo tanto del Pacto Mundial sobre los Refugiados como de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible. Sin embargo, en este momento, obtener acceso a la educación superior sigue siendo una lucha incierta para las poblaciones refugiadas, ya que apenas el 3% logra inscribirse. 

En consecuencia, en diciembre de 2020, lanzamos ASPIRAR A MÁS, una campaña que busca cambiar la realidad mediante la financiación de becas para personas refugiadas brillantes. 

Las contribuciones del sector público y privado ya suman 68% de los fondos requeridos para alcanzar la meta de 9.200 estudiantes que lograron inscribirse y están estudiando. 

Por ahora, ASPIRAR A MÁS exhorta a que las empresas, fundaciones y personas físicas apoyen en la recaudación de los 23 millones de dólares (USD) faltantes para cerrar la brecha y evitar el rezago de 1.800 estudiantes refugiados.

Cómo marcar la diferencia

ASPIRAR A MÁS es un llamado a invertir en la mejor oportunidad que tenemos para construir un futuro colectivo: mentes dedicadas, jóvenes y hábiles.  

Si las personas refugiadas tienen acceso a educación superior, no solo se beneficia la población estudiantil, sino también la comunidad en su conjunto. Sin importar que las personas refugiadas hayan sido reasentadas o acogidas en países de asilo, y sin importar que hayan regresado a su lugar de origen, tener acceso a educación superior les ofrece oportunidades laborales y les permite desarrollar su potencial para luego contribuir activamente a la economía local.

Esther, de Sudán del Sur, estudia Comercio en Uganda

"Mi vida cambió social y académicamente gracias a la beca para personas refugiadas del ACNUR (DAFI). Mi familia tiene la esperanza de que las cosas cambien. Esperan que me gradúe; después, enviarán a mis hermanos pequeños a la universidad para que sigan mis pasos".

Exhortamos a personas físicas, empresas, organizaciones y fundaciones a apoyarnos en la recaudación de 23 millones de dólares (USD) para que 1.800 estudiantes refugiados como Esther tengan acceso a educación superior hacia 2023.  

Realiza un donativo

Ayuda a que la población estudiantil refugiada tenga la oportunidad de recibir educación superior; o bien, puedes apoyar con el costo de libros, transporte y manutención.

Dona hoy mismo

Involucra a tu organización mediante un reto para recaudar fondos para la población estudiantil refugiada 

Podemos brindarles apoyo a tu equipo y a ti en la creación de experiencias memorables – para el personal o miembros de su organización – en la recaudación de fondos para la población estudiantil refugiada. Favor de contactar a Paula Holloway ([email protected]) para obtener más información.

Apoya la campaña ASPIRAR A MÁS por conducto de tu empresa o fundación

Tu empresa o fundación pueden garantizar que la población estudiantil refugiada se convierta en la líder del futuro. Para obtener más información, favor de contactar a Simon Jackson ([email protected]).

Programa de becas para refugiados del ACNUR

El Programa de becas para refugiados del ACNUR (DAFI) es el programa independiente de mayor alcance e historia en apoyo a la educación de las personas refugiadas. Actualmente, hay estudiantes en 53 países. En el transcurso de 28 años, el programa ha apoyado a más de 18.500 jóvenes refugiados (mujeres y hombres) en la obtención de licenciaturas.

¿Eres una persona refugiada o solicitante de asilo en busca de una beca? Consulta las opciones aquí.

Monther Alhoshan, de Siria, estudia Derecho con una beca del ACNUR

"Me aceptaron en el programa en 2014. Ni siquiera puedo describir cómo me sentí ese día. Pude recuperar la esperanza y mis sueños. La educación es todo en mi vida. En algún momento, regresaré a Siria y usaré mis habilidades y conocimientos para ayudar a mi gente".

Apoya a estudiantes como Monther con tu donativo

A pesar de los múltiples retos que enfrenta, la población estudiantil refugiada se esmera por triunfar en las disciplinas de su elección. En 2020, tan solo el 1% de quienes recibieron apoyo del programa DAFI tuvieron que repetir el año académico; además, el índice de bajas estuvo por debajo del 3%.  

El Programa de becas para personas refugiadas del ACNUR es:  

  • Rentable: el costo promedio de una beca es de 3.200 dólares (USD) al año. Este costo incluye no solo colegiaturas, sino también vivienda, alimentos y transporte.   
  • Justo e inclusivo: el programa garantiza que el acceso sea equitativo e inclusivo para todas las personas.   
  • Enfocado en la profesionalización, aunque también impulsa la preparación y empleabilidad de la población estudiantil. Esto incluye capacitación específica, adquisición de habilidades, prácticas y mentorías, así como oportunidades de voluntariado y vinculación. 

Nuestros logros hasta el momento

En los primeros cinco meses, gracias a la inversión tanto de empresas como de personas físicas, la campaña ASPIRAR A MÁS ha logrado recaudar más de 4 millones de dólares (USD), lo cual ha permitido que cerca de 1.250 estudiantes cursen y concluyan un año completo de su carrera universitaria.

Bahati Hategekimana, de Ruanda, concluyó recientemente la licenciatura en enfermería gracias a una beca del ACNUR.

"Agradezco que hayan estado ahí para apoyarme cuando se abrió una ventana de oportunidades. ¡Haber aprobado el examen implica que por fin seré enfermera autorizada!".

Comprender el impacto se torna casi imposible si se multiplica por el número de comunidades y personas que se benefician con la reacción en cadena generada por la educación.  

Y esto es apenas el comienzo. Con la ayuda de ASPIRAR A MÁS, el programa de becas del ACNUR será testigo del aumento en el número de personas que se integrarán a la familia internacional de egresados.