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ACNUR pide invertir más en la situación de las personas desplazadas de Afganistán para que la próxima década traiga esperanza en lugar de desesperación

Notas de prensa

ACNUR pide invertir más en la situación de las personas desplazadas de Afganistán para que la próxima década traiga esperanza en lugar de desesperación

3 July 2020
Una estudiante en clases en el instituto femenino de educación secundaria Shahid Mohamad Akram Khakrizwal en Kandahar, Afganistán, en febrero de 2020.

ACNUR, la Agencia de la ONU para los Refugiados, está pidiendo inversiones específicas tanto en Afganistán, como en Irán y Pakistán, países que acogen a refugiados afganos, advirtiendo que la falta de acción podría dar lugar a nuevos movimientos de población, a más sufrimiento e inestabilidad y a una crisis socioeconómica regional cada vez más profunda, agravada por la pandemia de COVID-19.

Mientras la prolongada crisis en Afganistán entra en su quinta década, es necesario renovar el llamado a la solidaridad internacional para garantizar que se evite otra década de desplazamiento y desesperación y se devuelva la esperanza a millones de afganos.

Unos 2,7 millones de refugiados afganos siguen viviendo fuera de su país, mientras que otros 2,6 millones están desplazados en Afganistán.

Desde 2012, el Afganistán, Irán y Pakistán han adoptado un enfoque regional – la Estrategia de Soluciones para los Refugiados Afganos – a fin de crear un entorno propicio para la repatriación voluntaria y la reintegración sostenible en Afganistán, aliviando al mismo tiempo la presión sobre las comunidades de acogida.

Trabajando en conjunto con estos tres países y con sus socios, ACNUR ha elaborado una serie de proyectos humanitarios y de desarrollo en materia de educación, salud, medios de vida, vivienda, energía, agua e infraestructura para impulsar el capital humano y, en última instancia, apoyar el retorno y la reintegración de los refugiados en Afganistán.

Desde 2002, casi 6 millones de refugiados afganos han retornado a sus hogares – 5,3 millones de los cuales con el apoyo del ACNUR – con la esperanza de reconstruir su país. Sin embargo, el ritmo de los retornos no ha sido acompañado por inversiones en desarrollo adecuadas. Los retornos voluntarios a Afganistán en 2019 fueron de los más bajos registrados en años.

Las recientes negociaciones para llevar la paz y la estabilidad al país representan un momento decisivo para el pueblo afgano. Sin embargo, muchos afganos en el exilio prefieren esperar que la situación mejore antes de regresar a su país. La mayoría de los refugiados en las Repúblicas Islámicas de Irán y de Pakistán indican que hay varios factores que obstaculizan su retorno y reintegración sostenible en Afganistán. Entre ellos, la falta de acceso a medios de vida, tierra, vivienda y servicios básicos, así como la continua inseguridad en el país.

En Afganistán, también es necesario abordar las evidentes deficiencias en la prestación de servicios de educación. Casi la mitad de la población afgana, de unos 37 millones de habitantes, es menor de 15 años. A través de esta iniciativa, se busca impulsar inversiones estratégicas para ampliar las oportunidades de educación, la capacitación profesional, el empoderamiento de los y las jóvenes y el desarrollo de la infraestructura pública, incluyendo las escuelas.

Además, tanto las personas desplazadas como las comunidades de acogida necesitan urgentemente intervenciones específicas en áreas como el alojamiento, la ayuda en efectivo, la salud, agua y saneamiento, así como inversiones en medios de vida.

Irán y Pakistán han acogido a la gran mayoría de los refugiados afganos durante los últimos 40 años, soportando una carga desproporcionada para brindarles protección y asistencia. En la actualidad, los dos países siguen acogiendo a casi el 90% de los refugiados afganos a nivel mundial, lo que pone a prueba los recursos y la infraestructura en ambos países. Ante el deterioro de las condiciones socioeconómicas en la región debido a la COVID-19, esta generosidad de larga data corre ahora el riesgo de agotarse.

El lunes 6 de julio, representantes de las Repúblicas Islámicas de Afganistán, Irán y Pakistán se unirán a ACNUR en una reunión virtual de alto nivel para buscar apoyo práctico y llamar a la acción en el marco de la Estrategia de Soluciones para los Refugiados Afganos.

La iniciativa busca impulsar inversiones por parte de países donantes, actores de desarrollo bilaterales y multilaterales, instituciones financieras internacionales, agencias de las Naciones Unidas, el sector privado, organizaciones no gubernamentales y la sociedad civil.

El futuro del pueblo afgano depende de que se establezcan nuevas alianzas y del compromiso sostenido de la comunidad internacional.

Enlace al B-Roll: https://media.unhcr.org/Share/kb35srr4eik7q3573wu6lkhd3t3mx651

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