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El Alto Comisionado Filippo Grandi elogia el papel de Chad al acoger a refugiados de Sudán y pide ayuda urgente

Comunicados de prensa

El Alto Comisionado Filippo Grandi elogia el papel de Chad al acoger a refugiados de Sudán y pide ayuda urgente

Más de 400.000 personas, en su mayoría mujeres, niñas y niños, han huido de Sudán hacia Chad, lo que representa casi el doble del número de refugiados sudaneses acogidos por el país.
10 September 2023
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YAMENA – El Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados, Filippo Grandi, ha declarado hoy que Chad necesita urgentemente más ayuda internacional para hacer frente al aumento del número de personas refugiadas procedentes de Sudán, país asolado por la guerra. Chad ya acogía a una gran población de refugiados antes del comienzo del conflicto en Sudán; ahora, una de cada 17 personas que viven en el país es refugiada.

Durante una visita de cuatro días a Chad, junto con la Directora Gerente de Operaciones del Banco Mundial, Anna Bjerde, Grandi fue testigo de la grave situación humanitaria que se vive sobre el terreno y pidió un mayor esfuerzo internacional para hacer frente a las necesidades urgentes y a largo plazo de las personas refugiadas y de las comunidades chadianas que las acogen.

“La solidaridad del pueblo chadiano hacia las personas refugiadas es extraordinaria, y las autoridades – tanto en Yamena como en las provincias orientales donde se ha producido la afluencia – no han escatimado esfuerzos para acogerlas, a pesar de los muy limitados recursos y de los muchos otros retos a los que se enfrenta Chad. La comunidad internacional, incluidos los actores del desarrollo, deben redoblar su compromiso para ayudarles”, declaró Grandi.

En poco más de cuatro meses, el conflicto en el vecino Sudán ha forzado a un asombroso número de personas a cruzar a Chad en busca de protección. Hasta el 6 de septiembre, más de 400.000 personas refugiadas habían llegado a las provincias de Ouaddaï, Sila y Wadi Fira. Resulta inquietante que el 86 por ciento de estas personas refugiadas sean mujeres, niñas y niños, lo que subraya el carácter crítico de la situación y las necesidades específicas.

La mayoría de los refugiados proceden de Darfur, donde el conflicto de Sudán ha desencadenado una violencia intercomunitaria a menudo brutal, que incluye asesinatos y violaciones de la población civil. Las personas refugiadas, marcadas por el trauma, llegan en condiciones desesperadas, sobre todo a la ciudad fronteriza de Adre, que acoge a más de 150.000 de ellas en un asentamiento espontáneo. Otros 75.000 refugiados han sido trasladados de Adre a dos asentamientos de refugiados construidos recientemente.

Aunque los socios humanitarios han realizado esfuerzos considerables para garantizar el acceso a servicios básicos como salud, agua, saneamiento y alimentos, la afluencia está ejerciendo presión sobre unos recursos y unas comunidades que ya se encontraban al límite de sus posibilidades, y los actuales niveles de financiación son insuficientes para atender tanto las necesidades de emergencia como las de desarrollo a largo plazo de la población refugiada y sus comunidades de acogida.

“Tanto las personas refugiadas como las comunidades que las acogen no pueden permitirse esperar a que termine la crisis para recibir atención y apoyo por parte del mundo. Debemos seguir reforzando urgentemente la respuesta humanitaria hoy, al tiempo que sentamos las bases de un sólido desarrollo socioeconómico para el futuro”, declaró Grandi. “Por eso ha sido tan importante visitar Chad y, en especial, las provincias orientales con el Banco Mundial: se trata de un caso claro en el que los actores humanitarios y de desarrollo deben trabajar juntos: lo que necesitamos aquí es desarrollo de emergencia para garantizar la resiliencia de todos los afectados”. Durante la visita, el Banco Mundial anunció un nuevo paquete de aportaciones por valor de 340 millones de dólares (USD) para ayudar a hacer frente a las múltiples perturbaciones a las que se enfrenta el país.

Desde que comenzó la afluencia, ACNUR y sus socios han reubicado a cerca de la mitad de los refugiados recién llegados en lugares de alojamiento seguros y adecuados, un ejercicio prioritario en la situación actual. Sin embargo, cerca de 170.000 personas en Adre y otras zonas fronterizas, junto con los recién llegados cada día, siguen esperando una reubicación urgente, que depende de la disponibilidad de recursos. 

Más de 5,2 millones de personas se han visto desplazadas por el conflicto, dentro de Sudán y en los países vecinos, incluidos los refugiados en Chad – el mayor país de acogida –, pero hasta ahora solo se han recibido unos 207,3 millones de dólares (USD) frente a unas necesidades totales de 1.000 millones de dólares (USD) para la respuesta regional a los refugiados.

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