Emergencia en Sudán del Sur
La situación en Sudán del Sur y en los países vecinos se ha convertido rápidamente en una emergencia humanitaria. Luego de casi una década de conflicto y a pesar de los esfuerzos por llegar a un acuerdo de paz, Sudán del Sur continúa luchando contra episodios de violencia, inseguridad alimentaria crónica y el devastador impacto de grandes inundaciones. Si bien ACNUR ha hecho todo lo posible por proporcionar albergues de emergencia, aun con recursos limitados, se espera que el desplazamiento en la región continúe en tanto no se encuentre una solución política.
Si eres una persona refugiada, da clic aquí para obtener más información.
“El viaje fue muy duro. El sol quemaba, y tuvimos problemas para encontrar comida y agua. Nuestro tío decidió regresar; nosotros seguimos porque queríamos ir a la escuela”.
Kenyi, de 17 años, es uno de los más de 5.000 niños refugiados no acompañados de Sudán del Sur que han llegado a Uganda
La mayoría de las personas refugiadas son mujeres, niñas y niños, muchos de los cuales han cruzado la frontera solos. A menudo llegan débiles y desnutridos. Al llegar la época lluviosa, sus necesidades aumentan por las inundaciones, la escasez de alimentos y las enfermedades.
Dentro de Sudán del Sur, hay casi dos millones de personas desplazadas internas, mientras que ya hay más de dos millones de sudsudaneses refugiados en países como Etiopía, Sudán y Uganda, lo que la convierte en la población refugiada de mayor tamaño en la región. Muchas de estas personas viven en condiciones precarias, que se han agravado con la pandemia de COVID-19, la sequía y la inseguridad alimentaria.
Las cifras más recientes se encuentran disponibles en el Portal de datos. Por otra parte, el sitio del Enfoque Global (Global Focus) contiene las últimas actualizaciones.