ACNUR hace un llamado para que Afganistán reciba aún más apoyo

ACNUR, la Agencia de la ONU para los Refugiados, exhorta a la comunidad internacional a brindar más apoyo a la población afgana, con inclusión de las personas desplazadas internas y las refugiadas que buscan protección fuera del país.

El llamado se dio al final de la visita de cuatro días de Raouf Mazou, el Alto Comisionado Auxiliar para las Operaciones. Esta fue la primera visita del funcionario en el país.

“Afganistán se encuentra en un momento crítico e histórico”, dijo Mazou. “Como parte de los esfuerzos por alcanzar la paz, las labores de socorro y desarrollo también deben ampliarse”.

Además, expresó su preocupación por los nuevos desplazamientos causados por la violencia, que no da tregua. En lo que va de 2021, más de 100.000 personas afganas han sido desplazadas al interior del país debido al conflicto.

En Mazar Sharif, al norte de Afganistán, Mazou se entrevistó con refugiados retornados, quienes estaban aprendiendo a tejer alfombras. En el distrito de Qarabagh, en la provincia de Kabul, el Alto Comisionado Auxiliar inauguró la Escuela Mixta de Akakhail. Ambas son iniciativas de ACNUR, que colabora con el gobierno afgano para facilitar la reintegración de los refugiados retornados.

“Brindar apoyo en cuestiones sanitarias, educativas y de medios de vida – de manera que redunde en beneficio de las comunidades de acogida, de las personas desplazadas internas y de las personas refugiadas retornadas – es un elemento clave en el proceso de creación de paz”.

Durante su visita a Kabul, el Alto Comisionado Auxiliar se reunió con el primer vicepresidente, Amrullah Saleh; el Ministro de Repatriación y Refugiados, Noor-e-Rahman Akhlaqi; y el Ministro de Relaciones Internacionales en turno, Mirwais Nab, frente a quienes reiteró el apoyo del ACNUR.

Actualmente, la población de Afganistán suma casi 35 millones de personas; la mayor parte son jóvenes que enfrentan retos en materia económica y de seguridad. Además, millones de personas han sido desplazadas al interior de Afganistán, o bien, han tenido que abandonarlo y, a pesar de los devastadores efectos de la pandemia de COVID-19, han sido acogidas como refugiados en otros países, como Irán y Pakistán.

En los últimos seis meses, con la distribución de kits de higiene, kits de alojamiento de emergencia, casas de campaña para familias, kits de saneamiento y otros artículos de ayuda no alimentaria, ACNUR ha brindado asistencia a más de 100.000 personas desplazadas internas en Afganistán. Aunado a ello, se ha proporcionado ayuda financiera a personas en situación de vulnerabilidad, como las personas adultas mayores, la niñez y las mujeres en situación de riesgo, personas con discapacidad, y personas con enfermedades o padecimientos graves. 

Si bien la comunidad internacional ha hecho contribuciones inmensas en los últimos veinte años, la ayuda y los fondos para Afganistán van en declive, a tal grado que la asistencia humanitaria en el país se enfrenta a la escasez. ACNUR solicita 123,5 millones de dólares (USD) para el año 2021; sin embargo, hasta el momento, apenas se ha recibido el 25%.