ACNUR, los Gobiernos español y vasco, Cáritas y Jesuitas firman convenio sobre proyecto piloto de patrocinio comunitario para acogida e integración de refugiados
ACNUR, los Gobiernos español y vasco, Cáritas y Jesuitas firman convenio sobre proyecto piloto de patrocinio comunitario para acogida e integración de refugiados
Coincidiendo con el Día Mundial del Refugiado, el Gobierno de España, el Gobierno Vasco, ACNUR, Cáritas Euskadi y la Plataforma de Jesuitas del País Vasco han firmado hoy en la sede de Lehendakaritza, en Vitoria-Gasteiz, un convenio para impulsar el programa piloto de Patrocinio Comunitario Auzolana II, sobre acogida e integración de personas refugiadas y beneficiarias de protección internacional.
En el acto de firma del convenio y posterior rueda de prensa han participado Jonan Fernández, Secretario General de Derechos Humanos, Convivencia y Cooperación del Gobierno Vasco; Estrella Rodríguez, Directora General de Integración y Atención Humanitaria del Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social; Francesca Friz-Prguda, Representante de ACNUR en España; José Emilio La Fuente, Secretario General de Cáritas Euskadi; y Kontxi Claver, Directora de la Fundación Ellacuría, en representación de la Plataforma de Jesuitas del País Vasco.
"Las iniciativas de patrocinio comunitario como esta son fundamentales en la protección, acogida e integración de las personas refugiadas, gracias a su gran poder transformador y multiplicador"
El Patrocinio Comunitario consiste en la auto-organización e implicación directa de ciudadanos y ciudadanas, ONG u otros grupos en los procesos de acogida e integración de personas refugiadas. Grupos compuestos por ciudadanos y ciudadanas se comprometen a facilitar vivienda y ofrecer apoyo económico, emocional y social durante un periodo establecido, normalmente un año.
“Las iniciativas de patrocinio comunitario como esta son fundamentales en la protección, acogida e integración de las personas refugiadas, gracias a su gran poder transformador y multiplicador”, afirmó Francesca Friz-Prguda, Representante de ACNUR en España. “Tener una o varias manos amigas en el difícil camino de la adaptación e integración en un país completamente nuevo en el que empezar de cero marca una importante diferencia”, añadió.
Este modelo permite mejorar cuantitativa y cualitativamente la acogida e integración de personas refugiadas. El Patrocinio Comunitario está inspirado en la experiencia canadiense; el propio Gobierno de Canadá impulsó la Iniciativa Global para el Patrocinio de Refugiados (GRSI por sus siglas en inglés), con el apoyo de la Agencia de la ONU para los Refugiados, para promover este modelo que ya se está implantando en países como Brasil, Argentina, Irlanda, Reino Unido y Alemania.
El proyecto piloto se puso en marcha el 26 de marzo, tras la llegada a Euskadi de cinco familias integradas por 29 personas refugiadas, 16 de ellas menores. Todas ellas de nacionalidad siria y procedentes de Jordania. Cinco grupos de voluntarios, denominados en el convenio como “Grupos Locales de Patrocinio Comunitario”, se encargaron de su acogida e instalación en cinco municipios: Bilbao, Arrigorriaga, Portugalete, Andoain y Vitoria-Gasteiz.
Anteriormente a la llegada estos grupos habían preparado una vivienda en cada municipio y un proyecto de trabajo para promover la acogida e integración de estas personas validado por el Gobierno español, ACNUR y el Gobierno Vasco.
Los cinco grupos locales de voluntarios cuentan con el respaldo y cobertura de Caritas -en Bilbao, Andoain y Vitoria-Gasteiz- y de Jesuitas -en Arrigorriaga y Portugalete-, organizaciones que están encargadas de la coordinación y seguimiento de esta experiencia piloto, que tiene dos objetivos:
-Desarrollar un modelo de acogida e integración de personas refugiadas en el que, mediante fórmulas diversas de asociación, auto-organización e implicación colectiva, la sociedad asuma responsabilidad directa en procesos de acogida e integración.
-Generar sinergias y valor añadido que redunden en la mejora cualitativa de estos procesos con impacto positivo en el logro de su autonomía y de la convivencia armónica en el contexto social en el que se haya producido la acogida.
Se pretende extraer aprendizajes y conclusiones que puedan volcarse a un proyecto amplio de extensión del Patrocinio Comunitario, tanto en Euskadi como en otras Comunidades Autónomas
Se pretende, asimismo, extraer aprendizajes y conclusiones que puedan volcarse a un proyecto amplio de extensión del Patrocinio Comunitario, tanto en Euskadi como en otras Comunidades Autónomas y que pueda, además, ser presentado como una iniciativa replicable. Por este motivo, la experiencia piloto seguirá en paralelo un proceso de sistematización y evaluación.
En relación a los programas de reasentamiento, Fernández añadió que “en un momento en el que sigue aumentando la brecha entre el número de plazas disponibles y el número de refugiados necesitados de ser acogidos, este programa supone una oportunidad que canaliza los deseos de la sociedad vasca de ayudar y solidarizarse con aquellos que huyen del conflicto y la persecución en sus países”. Su intervención subrayó asimismo que “la solidaridad no es un problema, el problema es su ausencia”.
Por su parte, el Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social, a través de una declaración institucional con motivo del Día Mundial del Refugiado, reafirmó el compromiso del Gobierno para garantizar la acogida e integración de las personas con necesidad de protección internacional que llegan a España. Asimismo, se abogó por fortalecer los mecanismos de acogida, incluyendo el reasentamiento, y por impulsar nuevas vías de acogida como el patrocinio comunitario, que implica directamente a la sociedad civil.
Este proyecto está en línea con el Pacto Mundial sobre Refugiados, una de cuyas metas es incrementar los programas de reasentamiento y vías legales complementarias de entrada de refugiados a países seguros, así como trabajar con este colectivo desde un enfoque multi-actor.
De acuerdo con los datos presentados ayer por ACNUR en su último informe estadístico, Tendencias Globales 2018, tan solo 92.400 refugiados de los 1,4 millones de refugiados identificados como en situación de alta vulnerabilidad y en necesidad de ser reasentados se beneficiaron de estos programas en 25 países de todo el mundo (apenas el 7%).
La Agencia de la ONU para los Refugiados reveló ayer que la cifra de personas desplazadas por los conflictos y la persecución alcanzó un nuevo récord en 2018 con 70,8 millones de personas, el nivel más alto registrado jamás.