España: ACNUR insta a poner fin a las devoluciones automáticas en Ceuta y Melilla
España: ACNUR insta a poner fin a las devoluciones automáticas en Ceuta y Melilla
La Agencia de la ONU para los Refugiados expresa su preocupación por la posible devolución automática a Marruecos de un grupo de 29 personas de origen subsahariano que habrían intentado entrar en España por la valla de Melilla el 26 de mayo.
De acuerdo con la información reflejada en medios de comunicación, que citan fuentes de la Delegación del gobierno en Melilla, un grupo de 120 personas de origen subsahariano habrían intentado alcanzar territorio español en torno a las 06:30 de la mañana del jueves 26 de mayo. De ellas, 30 lograron subir a lo alto de la valla por una zona entre el Barrio Chino y el aeropuerto, permaneciendo encaramados algo más de una hora. Según estas mismas fuentes, sólo una de estas personas consiguió superar el dispositivo de la Guardia Civil y llegar al CETI, mientras que las otras 29 habrían sido devueltas a Marruecos sin procedimiento alguno.
ACNUR reitera que la enmienda a la ley de extranjería, aprobada en marzo de 2015 por la que se establecía un régimen especial para Ceuta y Melilla mediante la introducción de la figura del "rechazo en frontera" – y cuya retirada ACNUR había solicitado – no avala las devoluciones automáticas al hacer referencia expresa a las obligaciones internacionales que debe cumplir España en materia de derechos humanos y protección internacional (Disposición adicional 10).
Tanto el Consejo de Europa como otros organismos internacionales coinciden con ACNUR al señalar que estas prácticas y la interpretación de la enmienda realizada por las autoridades españolas no son acordes con la legislación internacional y europea que expresamente prohíben las expulsiones colectivas y sin garantías. Estas prácticas contrastan con las garantías que las propias autoridades españolas han defendido en Bruselas, con el respaldo de las Cortes españolas, en relación a la aplicación del acuerdo de la Unión Europea con Turquía que incluiría un tratamiento individualizado a toda persona que llega a territorio europeo, asegurando el derecho a pedir asilo. ACNUR desconoce si las personas que intentaron ayer alcanzar territorio español huían de la guerra o la persecución o querían entrar por otros motivos. En todo caso, la práctica de las devoluciones automáticas impide que se lleve a cabo este tratamiento individualizado y que se identifique adecuadamente a posibles refugiados o a personas con otras necesidades de protección. Las devoluciones automáticas no son la solución para gestionar flujos mixtos en la frontera.
La oficina de ACNUR ha hecho varias propuestas a las autoridades españolas para la puesta en marcha de un mecanismo de identificación de personas en necesidad de protección, coincidentes con los posicionamientos expresados por el Consejo de Europa y el Defensor del Pueblo.
ACNUR expresa su preocupación por lo que parece ser una práctica creciente en las ciudades autónomas de Melilla y Ceuta, donde se han registrado al menos seis incidentes de esta naturaleza desde noviembre de 2015.
ACNUR reitera la necesidad de poner fin de forma inmediata a esta práctica de las devoluciones automáticas y solicita la adopción de un procedimiento que incluya mecanismos de identificación que respeten los derechos humanos y aseguren el acceso al asilo de quienes huyen de la guerra y la persecución.