Un refugiado muerto tras enfrentamientos en un campamento de Ruanda
Un refugiado muerto tras enfrentamientos en un campamento de Ruanda
ACNUR, la Agencia de la ONU para los Refugiados, reitera su llamamiento a las autoridades ruandesas y a los refugiados en favor de la moderación y la calma tras los recientes enfrentamientos que han dejado un saldo de un muerto y varios heridos en el campamento de refugiados de Kiziba, al oeste de Ruanda.
Si bien aún se conocen con certeza las circunstancias que rodean este incidente, según las primeras informaciones, la muerte del refugiado es consecuencia de un enfrentamiento que tuvo lugar el martes entre la Policía Nacional de Ruanda y un grupo de jóvenes refugiados. El hombre resultó herido y fue llevado a un hospital del distrito de Kibuye, pero finalmente murió a causa de las heridas durante la noche.
ACNUR lamenta profundamente esta tragedia y ha hecho llegar sus condolencias a la familia del fallecido. Asimismo, ACNUR insta a la policía y a los refugiados a evitar nuevos enfrentamientos y a resolver sus diferencias de manera pacífica.
El campamento de Kiziba acoge a más de 17.000 refugiados congoleños, muchos de los cuales viven allí desde más de dos décadas y otros incluso han nacido allí. Ante la disminución de la asistencia y de las raciones alimentarias debido a la persistente falta de fondos, los residentes comenzaron una serie de protestas en febrero.
El 22 de febrero ya se había producido un enfrentamiento previo, que se había saldado con 10 refugiados muertos y numerosos heridos, también entre los miembros de la policía.
La policía nacional ruandesa había reforzado su presencia en Kiziba, incrementando el número de agentes el pasado 20 de abril. Los últimos enfrentamientos habrían comenzado el lunes 29 de abril, cuando la policía utilizó gases lacrimógenos tras ser bloqueados por jóvenes refugiados. Un niño de 12 años resultó herido y se está recuperando en el hospital, mientras otros 23 refugiados habrían sido arrestados por lo que la policía ruandesa ha calificado de provocaciones.
En esta situación de tensión, algunos refugiados han manifestado su deseo de regresar a la República Democrática del Congo (RDC) por que no ven otra solución. ACNUR les ha pedido que tomen una decisión con pleno conocimiento de causa y no se dejen influir por rumores o información distorsionada.
Los continuos enfrentamientos también han obstaculizado el acceso humanitario al campamento de Kibiza. ACNUR y sus socios están teniendo graves dificultades para proporcionar apoyo y asistencia a los refugiados.
Al tiempo que continúa trabajando para alcanzar una solución pacífica a esta situación, la Agencia de la ONU para los Refugiados también pide a los donantes que contribuyan para cubrir el déficit de financiación para la acción humanitaria y las necesidades urgentes de los refugiados. A pesar de que ACNUR ha solicitado 98,8 millones de dólares para ayudar a los refugiados en Ruanda en 2018, hasta la fecha apenas ha recibido el 13% de esta cantidad.